Por regla general la gente considera que un marco únicamente funciona como protección y resalte de una obra de arte, pero esto no es del todo cierto, tiene muchas otras funciones como nos recuerda María Pía Timón en su curso “El marco en España” impartido hace unos años ya en el Instituto de Patrimonio Español.
- Es un objeto que protege la obra de arte. Esta es quizás una de las razones de su origen, pues nace de la necesidad de aportar un sustento físico a las pinturas. De hecho, por medio del marco se manipula la obra garantizando la protección y conservación de la misma, y además proporciona solidez en cuanto a estructura se refiere.
- Complementa y completa la obra que enmarca, es decir, enriquece a la obra desde un punto de vista estético.
- Personaliza la creación artística y actúa como frontera o “marka”, como indicia su etimología germánica, al separar la realidad de la ficción y determinar el límite con el mundo irreal.
- Destaca la obra del muro en el que se expone.
- Focaliza la atención del espectador.
- Ayuda a distinguir un cuadro entre varios expuestos en el mismo lugar.
- Puede encargarse de dar uniformidad a una exposición o a una estancia concreta.
- Dota a la pintura de una tercera dimensión.
Por todos estos motivos conviene tener una idea clara de lo que se busca o, en su defecto, solicitar una ayuda personalizada para buscar el marco más adecuado para cada obra en concreto.